Buenos Aires. Día 13. 01 de noviembre.

Bueno, en la fecha en la que estamos, nada más oportuno que la visita de ayer al Cementerio de la Chacarita. Me lo ha hecho notar Luisa, yo ni me había dado cuenta.

Aquí, la fiesta de Halloween no parece celebrarse mucho. Y hoy tampoco es festivo.

Ayer querría haber ido al Parque del Centenario, en su interior esta el Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia. Pero, al final, terminé en el cine. Viendo una película de humor y costumbrista. Naturalmente argentina. No era muy buena, pero refleja algunas situaciones familiares curiosas, en Argentina y en el mundo mundial. Se titula "Esperando a la carroza". No es recomendable. Los miércoles el cine es más barato, cuesta 21 pesos, unos 3,5 €. Eso sí, comprar una entrada supone un interrogatorio de unos cinco minutos, nada en Buenos Aires es conciso en las conversaciones. ¿Dónde le gusta la localidad? Tengo estos huecos (te muestran un gráfico). Les pides lo que quieres, pero la taquillera te aconseja otra butaca distinta. ¿Tomará alguna gaseosa? ¿O palomitas? ¿O alguna otra cosa? ¿Conoce nuestro cine? ¿Sabe como encontrar su sala y su película? Esperamos que le guste. Gracias. Páselo bien... ¡No exagero nada!

Otra cuestión, el tema de comer. Podría guisarme en casa, pero como por ahí. Aunque últimamente compro la comida cocinada y me la llevo a casa. Es una buena opción, es algo más barata y de buena calidad. Especialmente con la pasta, hay mucha variedad y a precio razonable. Te la llevas caliente, te proporcionan cubiertos, servilletas. Eso sí, primero tienes que contestar a un largo cuestionario, algo semejante al cine.

La pizza es otro mundo de dimensiones muy grandes. Es muy buena y relativamente barata. Aquí existen pizzerías de toda la vida, muy antiguas y de gran prestigio. Un día haré un recopilatorio: Guerrin, Las Cuartetas, La Imperial... Algunas cerca de casa.

Camino del metro para ir al Parque Centenerio, cerca de casa, se pasa por Cátulo, la sala donde está noche espero cenar y escuchar tangos.

Parque Centenario es la denominación que recibe un espacio verde público que se encuentra ubicado en el centro geográfico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, entre las avenidas Díaz Vélez, Patricias Argentinas, Leopoldo Marechal y Ángel Gallardo, en el barrio de Caballito, en una zona limítrofe con los barrios de Almagro y Villa Crespo. Fue inaugurado con motivo de los festejos del Centenario Argentino de la Revolución de Mayo, en 1910, ya que hasta ese momento se trataba de una zona de descampados que sobrevivían en una ciudad en rápido crecimiento. De ahí su nombre. Es un lugar realmente atractivo. Cerca está el Auditorio Eva Perón y el Museo de Ciencias Naturales Berbardino Rivadavia. El domingo, a las ocho de la tarde, iré a escuchar un concierto a este Auditorio. El Museo tiene un horario muy particular, abre a las 14 horas, por esta razón hoy no he ido, lo haré otro día.

Los parques de Buenos Aires son realmente fantásticos, grandes y con una vegetación muy hermosa. Además, son lugares donde uno puede conversar con sus vecinos fácilmente. Hoy lo he hecho con dos colegas jubilados, hemos hablado de todo, pero lo que más les ha sorprendido ha sido mi forma de viajar en solitario, no entendían como mi mujer me lo permitía. Ha sido curioso. Naturalmente hemos hablado de muchas más cosas, sobre todo de política. Uno era de origen francés.

Una observación que no quiero que se me pase, aquí no se toman cañas, no hay hora del aperitivo, y, sorprendentemente, se bebe muy poca cerveza. Será por el precio, en un bar normal cuesta 28 pesos, 4,5 €. En el supermercado cuesta un botellín casi 8 pesos, 1,25 €. Desde que estoy aquí, hoy me he tomado la tercera cerveza.